La Aventurera

Según la Real Academia Española, la palabra aventurera tiene varias acepciones, por ejemplo:
1. adj. Que busca aventuras.

Me gusta esta acepción. Me remonta a la primera vez que vi la película Los Goonies. Una bola de chavitos que buscan aventuras y descubren un tesoro. Cuando viajo hay una parte de mí que se siente goonie, voy en busca del tesoro que puede ser un museo, un cuadro o un paisaje. Pero no sólo en los viajes me siento goonie, la ciudad de México ofrece aventuras que están ahí para ser descubiertas. En el peregrinar de las aventuras me animé a ir a ver “Aventurera” al Teatro Blanquita.

La ubicación del teatro ya de entrada es garantía de que el público será multicultural, el tipo de espectáculo también sugiere que habrá asistentes de todas las edades. Último día de la temporada, lleno total, filas y filas en taquilla sobretodo de chavos porque el Gobierno del Distrito Federal patrocinaba la función. Instalada en la butaca observé que “El Blanquita” luce remodelado pero no oculta su edad y su estilo más bien rústico. El escenario luce impecable, con una parte tipo pasarela y dos pantallas que transmiten de manera impecable y con animación lo que ocurre en escena.

A las 8.45 comenzó el espectáculo y con él, el bochorno que se deja sentir en un teatro con cupo completo. Música, baile, colorido vestuario, luces que en principio atrajeron mi atención después de 2 horas y media se convirtieron en un chasco. Y en ese momento me preguntaba -¿Qué es esto? y trataba de contestarme: ¿Cabaret? ¿Burlesque? ¿Revista? Sí , en algún lugar leí que era revista.

De acuerdo con la definición de Wikipedia, la revista es un espectáculo que combina música, baile y, muchas veces, también breves escenas teatrales humorísticas o satíricas.

La primera parte correspondía a la definición pero la segunda ya no, porque las escenas de Aventurera NO son breves y en lugar de humorísticas terminan siendo vulgares y sobreactuada complementadas con una sátira grosera e inelegante.

Ninguno de los actores cautiva por su desempeño en escena, quizá se rescata que la Aventurera en turno, Sabine Moussier es muy guapa y tiene unas formas voluptuosas que inspiran miradas lujuriosas, quijadas caídas y celos femeninos. Por lo demás, mi acompañante y yo nos quedamos sin comprender por qué este espectáculo ha durado en escena 13 años y cómo es que tanto público asiste encantado a celebrar las simplezas arrabaleras y malas palabras que no aportan absolutamente nada a la cultura del espectador. Es impactante ver que además de telebasura también estamos expuestos a puestas en escena calamitosas como ésta.